Lowly Light x Mishell Ivon nos traen Revenge was Never my Religion. Una película emotiva en forma de canción que nos recuerda que la vulnerabilidad es también una demostración de corage

Claro que a veces las personas nos rompen el corazón, aun cuando amamos tanto, aun cuando continuamos a hacerlo después de que desaparece de nuestras vidas. Este tema refleja todo por lo que cada uno ha pasado. Un corazón roto mientras somos adolescentes, intentar ocultarlo en la pista de baile. Sabemos el dolor que provoca y aún así esta canción nos habla de no responder con venganza sino sobre trabajar sobre nosotros mismos con dignidad.

Perfecto ritmo de electro pop. La intro te atrapa en esa atmósfera electronica que recuerda los años 2000-2010. Una melodía que acompaña una letra que atrapa una triste realidad que todos hemos vividos, todos hemos tenido esos recuerdos tristes cubiertos con glitter. Cuando hay un corazón roto el diagnostico es una buena canción que te ayude a sanar, a veces para ayudarnos a reconocer que tenemos nuestras propias convicciones y no elegir venganza, sino un buen tema como esta. Revenge Was Never My Religion tiene esa suavidad que te hace volar, como si la bola de la discoteca estuviera en tus oidos.

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